Abstract |
Costa Rica tiene un modelo de desarrollo fundado en la apertura comercial. Tratados preferenciales de comercio y exitosa atracción de inversión extranjera directa (IED) dieron lugar a un crecimiento acelerado de exportaciones que mejoraron las condiciones macroeconómicas y diversificaron el aparato productivo. No obstante, todo ello repercutió poco en el tejido productivo y las empresas nacionales aparecen con poca evolución de su productividad y competitividad. Al éxito exportador lo acompaña un agravamiento de la desigualdad, en contraste con el resto de países de América Latina. Este artículo apunta a la estructura heterogénea del aparato productivo y plantea políticas de fomento fiscal para la inversión privada en investigación, desarrollo e innovación que conduzcan al mejoramiento de la productividad total de factores. Se exponen las políticas fiscales de Brasil, Chile y Uruguay y se recomienda que Costa Rica adopte políticas semejantes, salvedad hecha de las limitaciones estructurales de su modelo fiscal. |