Abstract |
Tradicionalmente en los barrios de la ciudad de Quito, se festeja la “quema del año viejo” que tiene lugar la noche del 31 de diciembre de cada año. En el barrio “Las Casas”, sector de clase media, este festejo se ha venido manteniendo a través de los años como una fiesta familiar. Es así que la confección del año viejo, el travestismo de las viudas y la construcción de la instalación son tareas inherentes a los miembros de la familia. Sin embargo, en los últimos años se evidencian cambios significativos en el festejo, ya no se trata solamente de una fiesta familiar sino que grupos de amigos, personas pertenecientes a opciones sexuales minoritarias e individuos travestidos de viudas en busca de una instalación de año viejo, son los nuevos protagonistas de esta fiesta cuya concepción misma ha ido cambiando. Las viudas pasean su travestismo en las calles del barrio y la ciudad; al parecer su presencia es normal en esta fecha, pero me pregunto: ¿en qué medida las fiestas en su conjunto contribuyen a la transgresión y ruptura del orden sexual y social establecido?, ¿o en qué medida refuerzan el statu quo? Este estudio busca establecer el papel de las viudas en las negociaciones del orden sexual, así como la memoria y la nueva visión y evolución que se da en torno a la instalación del año viejo y las viudas en los últimos años. |