Abstract |
Tijuana, como ciudad fronteriza, ha sido punto de encuentro para la llegada de miles de hombres y mujeres provenientes del interior del país en busca de oportunidades de empleo o para seguir el camino hacia Estados Unidos. En este artículo se analizan los efectos de la crisis económica reciente y las altas tasas de desocupación presentes en la región fronteriza de México para explicar los diversos cambios en la inserción laboral de los inmigrantes en relación a los nativos. Las recientes tendencias hacia la polarización de la estructura ocupacional, la segmentación y la precarización laboral han dado una nueva fisonomía a la ciudad, que pasó de constituir un lugar de oportunidades a uno de inseguridad social y laboral, por lo que se ha observado en la década de 2000 a 2010 una disminución en el componente social del crecimiento de su población. |