COL_2009_ECC_v01_M
Encuesta Consumo Cultural 2009
Survey on cultural consumption
Name | Country code |
---|---|
Colombia | COL |
Other Household Survey [hh/oth]
ANTECEDENTES DE LA OPERACIÓN ESTADÍSTICA
EXPERIENCIAS NACIONALES
ENCUESTAS DE CULTURA
El tema cultural como objeto de investigación de la estadística es un campo nuevo deacción tanto en el ámbito nacional como internacional. Las experiencias que se registran muestran como la cultura empezó a ser una preocupación de este campo tan solo en los últimos 10 años. La Encuesta de Consumo Cultural -ECC- realizada por el DANE en los años 2007 y 2008, constituye el antecedente más directo de esta encuesta. Este estudio explora aspectos como los hábitos de consumo cultural de los ciudadanos, el grado de acceso a los bienes y servicios que provee el sector cultural, así como las formas de utilización del tiempo libre y los hábitos recreativos. La Encuesta de Cultura 2009 – EC2009- se asume como un desarrollo derivado directamente de la ECC, de allí que, su documento metodológico constituya un referente fundamental y permanente. La EC2009 está constituida por un módulo dedicado a aspectos de interés específico del sector cultural el cual, en gran parte, se sustenta en la base conceptual diseñada en el marco de la ECC. Adicionalmente incluye un modulo que responde a los intereses de otros sectores en torno a fenómenos culturales, cuya base conceptual se ha construido en el presente documento.
El documento metodológico de la Encuesta de Consumo Cultural presenta un panorama de los acercamientos que desde el DANE se han hecho al tema de cultura. Se destacan allí los módulos de televisión incluidos en la Encuesta de Calidad de Vida realizada en el 2003 y en la Encuesta Continua de Hogares -ECH- del 2005; así como los módulos de hábitos de lectura incluidos en la Encuesta Nacional de Hogares del 2002 y el 2005.También se hace referencia a algunas preguntas que se han incluido en la Encuesta de Calidad de Vida (2003) y en la Encuesta de Ingresos y Gastos (2007), asociadas a la actividad cultural.
Adicionalmente a estas mediciones, el documento destaca la Cuenta Satélite en Cultura, la cual indaga respecto al aporte del sector cultura a la actividad económica del país. En cuanto a mediciones realizadas a nivel nacional por otras instituciones, el documento metodológico de la Encuesta de Consumo Cultural destaca la Encuesta Nacional de Cultura realizada por el Ministerio de Cultura en el 2002 y la Encuesta General de Medios – EGM- que realiza la Asociación Colombiana de Investigación de Medios -ACIM- desde 1997.
ENCUESTAS QUE TIENEN OTRAS APROXIMACIONES A LO CULTURAL
Por lo general las encuestas reseñadas anteriormente han abordado la reflexión sobre la cultura asociada fundamentalmente a procesos de creación y expresión desde las distintas disciplinas y áreas del sector cultural. También han abordado la caracterización de procesos asociados a la preservación de la memoria histórica y el reconocimiento y propiación social del patrimonio cultural. Por su parte, otras aproximaciones más amplias a lo cultural, entendido como procesos de construcción de valores, hábitos y prácticasimplícitas en las relaciones sociales y la convivencia ciudadana, han sido muy poco abordadas en el contexto nacional.
En ese sentido, se resalta la Encuesta Bienal de Cultura (Bogotá) (serie 2001-2005-2007) inicialmente llamada Encuesta de Conocimientos, Aptitudes y Percepciones sobre Cultura Urbana, Política, Arte y Patrimonio. Este estudio es realizado periódicamente por elObservatorio Permanente de Cultura Ciudadana de la Alcaldía de Bogotá, indaga por los comportamientos de los ciudadanos en el ámbito público, así como por sus percepcionesrespecto a lo político, el arte y el patrimonio. Bogotá cuenta con una amplia experiencia en la medición de percepciones y prácticas culturales asociadas al ejercicio de derechos ciudadanos y al respeto a las normas y los acuerdos. En 1995, en el marco del Plan Distrital de Desarrollo “Formar Ciudad”, la administración de Antanas Mockus desarrolló estrategias conducentes a la construcción de una cultura ciudadana centrada en el acatamiento voluntario de las normas y en el desarrollo de competencias para concertar y respetar acuerdos entre los ciudadanos. De manera simultánea al desarrollo de estas estrategias, el Observatorio de Cultura Ciudadana diseñó y aplicó instrumentos de medición que, desde es época, han permitido hacer un seguimiento a la evolución de estas prácticas. La experiencia pionera de Bogotá en cuanto a la medición de lo cultural en este sentido amplio se ha constituido en un paradigma para otras ciudades y municipios del país.
Otra experiencia significativa en este sentido es el Diagnóstico de la Cultura Ciudadana (Pereira) realizado por la Alcaldía de Pereira en el año 2005 el cual investigó las percepciones y prácticas de los pereiranos en relación a lo público, la legalidad y el ejercicio de derechos y deberes ciudadanos. También se destacan las encuestas asociadas al Proyecto Ciudades ¿Cómo Vamos?, el cual convoca a instituciones del Estado, organizaciones de la sociedad civil, organizaciones internacionales y medios de comunicación en torno al seguimiento de los Planes de Desarrollo de Bogotá, Medellín, Cartagena, Cali y Barranquilla. Específicamente, el indicador de responsabilidad ciudadana busca medir aspectos relacionados con el comportamiento de los ciudadanos en relación al uso del espacio público, al cumplimiento de las normas y al medio ambiente. Las variables: calificación ciudadana al nivel de responsabilidad y solidaridad de la ciudadanía, y calificación ciudadana al nivel de probabilidad de ser castigado por infringir normas, buscan captar la percepción de los ciudadanos en relación a los aspectos de interés colectivo.
ENCUESTAS QUE SE APROXIMAN A TEMAS AMBIENTALES DESDE UNA PERSPECTIVA CULTURAL
Como antecedente más cercano se encuentra la Gran Encuesta Nacional Ambiental 2008, realizada en el año 2008 por la revista especializada en temas ambientales Catorce 6 y la Universidad Nacional de Colombia. Esta encuesta indaga en torno a percepciones y prácticas de los ciudadanos relacionadas con el Medio Ambiente.
EL PROGRAMA DE ENCUESTAS POLÍTICAS Y CULTURALES Y LA MEDICIÓN DE LO CULTURAL
En el marco del Programa de Encuestas Políticas y Culturales EPYC del DANE, se han desarrollado investigaciones que, como denominador común, vinculan lo cultural a la caracterización de percepciones y prácticas. En este marco se han desarrollado ejercicios como la Encuesta de Cultura Política (2008) la cual aborda hábitos y percepciones ciudadanas respecto a lo político y al ejercicio de la participación ciudadana; la Encuesta de Victimización (2003) que, en términos culturales, se aproxima a la percepción que tienen los ciudadanos acerca de la seguridad, la criminalidad y los delitos en el ámbito cotidiano; la Encuesta de Calidad de la Gestión Estatal para el Desarrollo Empresarial (2007) que explora la forma en que los empresarios perciben la gestión del Estado en materia de promoción del emprendimiento y de la actividad empresarial.
EXPERIENCIAS INTERNACIONALES
ENCUESTAS SOBRE CONSUMO CULTURAL
En términos internacionales resaltan las experiencias de México, Argentina, Chile y España. Todas estas experiencias abordan aspectos en su mayoría relacionados con el consumo de bienes y servicios provistos por el sector cultural en sus distintas áreas y disciplinas (artes, comunicaciones, patrimonio, museos, bibliotecas etc,). Estas experiencias han sido analizadas a profundidad en el Documento Metodológico de la Encuesta de Consumo Cultural (2008).
ENCUESTAS QUE VINCULAN LO CULTURAL AL MEDIO AMBIENTE
CANADÁ
Respecto a las investigaciones que abordan lo cultural en relación a prácticas y percepciones que pueden afectar la calidad ambiental, se destaca la encuesta de hogares y medio ambiente (Households and the Environment) realizada cada dos años por el Estado canadiense (Statistics Canada), en el marco del proyecto Indicadores Canadienses de sostenibilidad ambiental. La encuesta constituye una demostración del reconocimiento progresivo del impacto de los hogares sobre el medio ambiente. Su objetivo es medir las acciones que generan algún tipo de impacto ambiental y proveer información que permita analizar estas percepciones y comportamientos. Las categorías que estudia este ejercicio estadístico son:
AGENDA 21
También se destacan las encuestas aplicadas en el marco del compromiso internacional Agenda 21. En 1992, en el marco de la Cumbre de la Tierra, realizada en Río de Janeiro (Brasil), 179 países acordaron diseñar y aplicar una agenda de trabajo para promover el desarrollo sostenible. La Agenda 21, planteó la realización de encuestas locales, de tal forma que en cada contexto específico se diseñaran agendas que respondieran a las necesidades particulares de cada población. En Europa la apropiación local de este acuerdo se materializó 2 años más tarde en la Conferencia Europea sobre Ciudades Sostenibles realizada en Aalborg (Dinamarca). En la Carta de Aalborg, 80 gobiernos locales europeos se comprometieron a ejecutar las acciones recomendadas por el Programa 21 de las Naciones Unidas, con el fin de aportar desde lo local para alcanzar el Desarrollo Sostenible. Por su parte en 1997, y luego en el año 2002, el Consejo Internacional para las Iniciativas Ambientales Locales -ICLEI - organización internacional que agrupa a gobiernos locales y asociaciones de gobiernos locales; y el Departamento de Coordinación de Políticas y Desarrollo Sustentable de la Organización de las Naciones Unidas, hicieron un seguimiento a los avances a los acuerdos suscritos en la Cumbre de Río. 10 años después de la Cumbre de la Tierra, 6.000 gobiernos locales habían adoptado la Agenda Local 21 construida a partir de procesos consultivos, como marco de trabajo hacia el desarrollo sostenible.
Actualmente el Consejo Internacional para las Iniciativas Ambientales Locales (ICLEI) cuenta con 1.000 miembros (entre asociaciones de gobiernos locales y gobiernos locales) comprometidos con el desarrollo sostenible y la Agenda Local 21 se ha convertido en un referente clave de la gestión pública local y de la planificación ambiental. En cada ciudad donde se ha definido una AL21, ésta ha partido de la aplicación de una encuesta que explora las percepciones de los ciudadanos en cuanto a calidad ambiental en el contexto urbano, movilidad, urbanismo, cantidad y calidad de los servicios públicos ofertados, y las zonas verdes y naturales de la ciudad.
UNIÓN EUROPEA
Como antecedente en el contexto Europeo es pertinente hacer referencia al estudio Research into Attitudes and Perceptions in five EC Countries –REAP -, realizado por la Comisión Europea, a través del consorcio COMPASS (The European Consortium for Comparative Social Surveys) que vincula a organizaciones líderes en la realización de encuestas en Europa ( EURISKO , IVA, SCPR, SSRC, ZUMA), el cual se ha articulado desde 1993 al International Social Survey Programme (ISSP), un programa de colaboración transnacional al que pertenecen 45 países del mundo. Fue creado en 1985, para abordar el estudio de fenómenos sociales y culturales muy afines a los intereses del programa EPYC del DANE. Entre sus ejes temáticos se encuentran, además de medio ambiente, cambios generacionales y en la familia, redes sociales, religión, inequidad social, ciudadanía, entretenimiento e identidad nacional, entre otros.
La Encuesta sobre Medio Ambiente (ISSP) ha sido realizada en dos ocasiones (1993, 2000) y se encuentra programada una tercera versión para el año 2010. Esta encuesta indaga acerca de las percepciones de los ciudadanos en relación al medio ambiente, así como los comportamientos que pueden impactar en él.
Adicionalmente en Europa también se aplican los Ecobarómetros, estudios anuales que indagan respecto de las actitudes, los conocimientos y los comportamientos de los ciudadanos en relación al medio ambiente, y frente a las instituciones y organizaciones que trabajan en el sector ambiental. Estos estudios son considerados piezas clave para la formulación de programas de educación ambiental y sustentan lineamientos de política pública.
ESPAÑA
Por su parte, el Ministerio del Medio Ambiente y Medio Rural y Marino de España, cuenta con el Banco Público de Indicadores Ambientales (BPIA), el cual compila los indicadores que el Estado español ha diseñado, con el fin de lograr un mayor conocimiento acerca de la situación del medio ambiente en su territorio. En el marco de lo que concierne a la Encuesta de Cultura 2009, se destacan los indicadores vinculados a la pautas de consumo en el hogar. En este marco, se destacan los siguientes indicadores:
Entre estos se destaca la Ecoeficiencia en el sector doméstico, indicador que expresa las presiones que los hogares ejercen sobre el medio ambiente, mostrando su impacto y la importancia de la educación ambiental y de las estrategias que impulsen cambios en las percepciones y en los hábitos de consumo doméstico.
AUSTRALIA
En Australia desde 1994 el Australian Bureau of Statistics (ABS), realiza cada año la encuesta sobre percepciones y prácticas de los australianos de 18 años y mas en relación al medio ambiente: Environmental Issues: People's Views and Practices (Australia). Esta encuesta se desarrolla a partir de 3 módulos que van rotando cada año. Los temas de los módulos rotativos son:
LATINOAMÉRICA
En el contexto Latinoamericano se encuentra también la experiencia de Perú, con el Módulo de opinión sobre el medio ambiente urbano (Perú), el cual fue incluido en la Encuesta Nacional de Hogares 1997 (II Trimestre)19, realizada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática – INEI -. Esta encuesta indaga respecto a la percepción de los jefes de hogar en relación al medio ambiente con el fin de enriquecer los estudios que vinculan población y medio ambiente. Aborda las siguientes categorías:
REFERENTES INTERNACIONALES
Al tema de lo cultural como realidad a medir, la ONU se ha preocupado desde su nacimiento por la visibilidad y reconocimiento de la cultura como factor clave del desarrollo. Por ello, y a través de la UNESCO, estos organismos internacionales han venido instaurando y ampliando el marco conceptual y las dimensiones ligadas a la cultura, así como los mecanismos y herramientas que permitan conocer la complejidad de dicha realidad.
En ese sentido, en el Informe mundial sobre la cultura 2000-2001: diversidad cultural, conflicto y pluralismo, con el precedente de que un solo indicador e índice no establece ni da cuenta de la compleja realidad de lo cultural, propone, además de ampliar y profundizar las categorías asociadas, vincular otras dimensiones del desarrollo que son asociadas a lo cultural.
La propuesta de identificar los esfuerzos nacionales y de establecer miradas mundiales tiene como propósito:
…desarrollar un sistema internacional muy completo de información estadística sobre la cultura, en el que se pueda comprender, medir y evaluar el comportamiento (…) a nivel local, comparándolo con el de otras localidades, y el comportamiento a nivel nacional, comparándolo entre países y regiones diferentes.
En esta línea, la agenda de investigación de la UNESCO atiende y pone sobre el escenario mundial áreas de estudio, con las cuales busca establecer un parámetro teórico y conceptual que facilite el abordaje de la realidad y la construcción de indicadores sobre la cultura a partir de diferentes registros y operaciones. Así mismo, avanzar en el diseño de indicadores con “fines evaluadores y no con fines descriptivos (Pattanaik, 1997)” que faciliten el análisis del progreso o recesión respecto con el fenómeno concreto que evalúan.
De acuerdo con lo anterior, la UNESCO ha definido seis áreas de interés que sirvan de referente y punto de encuentro para la creación de indicadores culturales desde diferentes ámbitos:
Aunque la UNESCO recomienda extender el trabajo a otras áreas como los valores, los patrones de conducta y los programas sociales, Colombia con la encuesta de Consumo Cultural da un primer paso en la línea de tener información sobre dos de las seis áreas propuestas: vitalidad cultural y acceso a la cultura.
Las prácticas culturales asociadas al consumo de bienes y servicios ofertados por el sector cultural, así como al uso del tiempo libre se plantean como nuevas dimensiones en la estructuración de la vida, tanto de los individuos como de los distintos grupos sociales. Una prueba de ello es la promulgación de lineamientos internacionales, en los cuales se otorga un lugar de relevancia al capital social y cultural de los pueblos y naciones, junto con el auge de los derechos y libertades que hacen visible una amplia gama de minorías sociales y culturales.
Sumado a ello, la creciente aparición de políticas estatales, que favorecen el desarrollo de la cultura, el deporte y la recreación, han expuesto y convertido en agenda pública una realidad importante: la dimensión social y cultural del ser humano.
Bajo esta perspectiva, la apropiación, la posesión y el uso de bienes, servicios y espacios culturales se ha convertido en un objeto de interés de las ciencias sociales, de la institucionalidad pública y de los organismos multilaterales en tanto que se han convertido en prácticas específicas que permiten seguirle la pista a los procesos culturales.
En distintas latitudes, desde diferentes perspectivas y magnitudes, algunos estudios han intentado abordar el tema del consumo cultural, de acuerdo con las características nacionales o poblacionales, las preferencias ciudadanas o con los gastos realizados por las personas. En Colombia, a pesar de que existen mediciones alrededor de la oferta y del dinero gastado por las personas en bienes y servicios promovidos por el sector cultural, así como en actividades de entretenimiento, diversión y ocio, existen algunas iniciativas para medir dichos fenómenos pero no con la amplitud y periodicidad requeridas.
De acuerdo con lo anterior, el DANE en su interés de extender sus fronteras temáticas ha adoptado el programa misional “Estadísticas políticas y culturales” como respuesta a las necesidades de información con calidad estadística en términos de confiabilidad, oportunidad, pertinencia y coherencia que demandan los diferentes usuarios sobre el complejo y amplio universo de lo cultural.
En ese escenario, el DANE adelanta investigaciones con el propósito de aportar conocimiento acerca de las relaciones entre el estado y la sociedad civil, la realización de los derechos de los ciudadanos (proyecto gobernabilidad y derechos humanos); la consolidación y profundización de la democracia como estrategia para el logro de la paz (proyecto democracia y participación); el reconocimiento de la diversidad cultural, la caracterización de prácticas y fenómenos culturales asociados con adscripciones identitarias, tradiciones y creencias, el consumo de bienes y servicios ofertados por el sector cultural, así como la valoración y el sentido que dan personas al patrimonio material e inmaterial (proyecto cultura, deporte y recreación).
Bajo el componente Cultura, Deporte y Recreación, el DANE lleva a cabo la encuesta de Consumo Cultural que tiene como objetivo hacer un mapa general de algunas prácticas culturales asociadas al uso y apropiación que hacen las personas de bienes, servicios y espacios ofertados y dispuestos por el sector cultural; así como de las horas asignadas al tiempo libre y el tipo de actividades desarrolladas en él.
Este trabajo tiene como marco legal e institucional el reconocimiento que se hace a la condición pluriétnica y multicultural de la nación a través de la Constitución Política; a la necesidad de conocer cuál es el nivel de democratización de la cultura mediante acciones concretas como el acceso a bienes y servicios culturales como lo plantea la Visión Colombia II Centenario “Forjar una Cultura para la Convivencia”. Otro alcance importante de las políticas culturales es la expresión y ejercicio de los derechos culturales y la diversidad cultural a través del estudio de las prácticas asociadas al consumo cultural, en consonancia con los lineamientos políticos del Plan Decenal de Cultura 2001-2010. El interés en el marco del Sistema Nacional de Cultura creado en la Ley General de Cultura, de crear y fortalecer sistemas de información que registren los procesos culturales existentes y seguirle la pista a as creaciones, memorias y ejercicios colectivos como individuales en el escenario de lo cultural.
Esta investigación, aunque reconoce la complejidad e indeterminabilidad de lo cultural en términos conceptuales y como categoría de estudio, responde a la inquietud de medir qué procesos y acciones se desarrollan desde la perspectiva cultural, en términos de acceso a la oferta de productos culturales existente, las tendencias y preferencias por grupos etáreos, género y regiones como un primer acercamiento al concepto de diversidad, y al tiempo libre invertido en actividades cotidianas de carácter no obligatorio.
En este caso, se indaga por la asistencia, la frecuencia de participación y el gasto que hacen las personas en presentaciones y espectáculos de teatro, danza, música en vivo, exposiciones y proyecciones cinematográficas. Por el uso y frecuencia de lectura, género y tipo de libros, revistas y periódicos leídos, y el gasto hecho en este tipo de bienes. Se explora también el consumo de videos, videojuegos, televisión, radio y música grabada, y por el tipo de prácticas culturales efectuadas y el acceso a ofertas educativas de carácter informal.
Con relación al diseño estadístico, esta operación se concibe como una encuesta por muestreo probabilístico que tiene como población objetivo las personas de 5 años y más de las cabeceras municipales del país. El diseño de muestra aplicado es probabilístico, de tres etapas ESTMAS (estratificado con muestreo aleatorio simple) – MAS (muestreo aleatorio simple) – MASC (muestreo aleatorio simple de conglomerados) y estratificado en la primera etapa.
La primera versión de esta investigación se realizó durante el año 2007, aplicándose el formulario de 84 preguntas a 8.275 personas en 2.415 hogares de 14 municipios del país1, a través del método entrevista directa a las personas de 12 años y más. En el caso de los menores entre los 5 y 11 años de edad, la información se obtuvo a través de la figura del informante idóneo: sus padres o acudientes. De este primer ejercicio, se publicó el informe de resultados en el primer semestre del año 2008 en la página Web del DANE, el cual incluyó información estratégica sobre los usos y frecuencias de consumo que tienen los residentes en Colombia de bienes y servicios culturales ofertados por el sector cultural.
Durante este mismo periodo, el equipo de trabajo de la Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización –DIRPEN- realizó los ajustes temáticos y metodológicos a los documentos y al formulario de la investigación, llevó a cabo las diferentes pruebas e hizo efectivos los ajustes pertinentes para efectuar durante el segundo semestre del 2008 la recolección de la segunda versión de la operación estadística. Entre el 19 de agosto y el 14 de noviembre del 2008, se aplicó la encuesta nuevamente a 38.237 personas de 12.031 hogares en 68 municipios del país2, a través del mismo método de recolección utilizado el año inmediatamente anterior. Aunque se mantuvo el mismo número de preguntas, éstas fueron revisadas y ajustadas dándole un mayor peso a bienes como libros, videos y música; y a servicios como el cine y las presentaciones y espectáculos de carácter cultural.
La Encuesta se suma a otra serie de estudios que ha realizado el DANE en el tema cultural: la Cuenta Satélite de Cultura, los módulos de televisión (en convenio con la Comisión Nacional de Televisión) y hábitos de lectura (trabajo con varias entidades, entre ellas el Ministerio de Cultura, Cámara Colombiana del Libro y Fundalectura), y las preguntas integradas en otras investigaciones que ofrecen nueva información sobre lo cultural como el Censo 2005, la Gran Encuesta de Hogares y la Encuesta de Ingresos y Gastos.
Encuesta por muestreo (ssd)
UNIDAD DE OBSERVACIÓN
Los hogares y las personas de 5 años y más, residentes en los hogares particulares de las cabeceras de los municipios del territorio nacional.
UNIDAD DE ANÁLISIS
Las personas de 5 años y más, residentes en los hogares particulares de las cabeceras de los municipios del territorio nacional.
UNIDAD DE MUESTREO
El diseño de la muestra se realiza en tres etapas por lo cual se tiene una unidad muestral en cada una de estas etapas, a saber:
Dentro de cada hogar seleccionado se aplica la encuesta a todas las personas residentes de 5 años y más.
OBJETIVO GENERAL
Caracterizar percepciones y formas de comportamiento que expresen prácticas culturales de la población de 5 años y más.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
Objetivos en relación a la demanda de bienes y servicios provistos por el sector cultural – Módulo de Consumo Cultural
CONTENIDO TEMÁTICO
ALCANCE TEMÁTICO Y PRINCIPALES INDICADORES
La encuesta aborda el Consumo Cultural desde la perspectiva que plantea Néstor García Canclini: “el conjunto de procesos de uso, apropiación y acceso (circuitos de circulación) a productos culturales, en los cuales el valor simbólico (es decir, los mensajes y las construcciones de sentido que se generan) prevalece sobre el valor de cambio”. De acuerdo con ello, la operación estadística entrega datos sobre las siguientes categorías e indicadores asociados:
USO DEL TIEMPO LIBRE
PRESENTACIONES Y ESPECTÁCULOS CULTURALES
PUBLICACIONES
AUDIVISUALES Y MÚSICA
ESPACIOS CULTURALES
FORMACIÓN
PRÁCTICA CULTURAL
Topic | Vocabulary | URI |
---|---|---|
Sociedad de la información [7.2] | CESSDA | http://www.nesstar.org/rdf/common |
Lengua y lingüística [7.3] | CESSDA | http://www.nesstar.org/rdf/common |
Actividades culturales y participación [13.2] | CESSDA | http://www.nesstar.org/rdf/common |
Identidad nacional y cultural [13.3] | CESSDA | http://www.nesstar.org/rdf/common |
Utilización del tiempo. [13.9] | CESSDA | http://www.nesstar.org/rdf/common |
En relación a la cobertura geográfica de la encuesta de Consumo Cultural ésta es total nacional cabeceras municipales.
En relación a la cobertura geográfica de la encuesta de Consumo Cultural ésta es total nacional cabeceras municipales y la desagregación que se tiene es de 7 regiones en consonancia con la propuesta de la Nomenclatura de la Unidad Territorial Estadística - NUTE-: Bogotá, Atlántica, Pacífica, Andina Norte, Amazonia, Andina Sur y Orinoquia, es decir, NUTE 1.
UNIVERSO DE ESTUDIO
Las personas de 5 años y más residentes en los hogares particulares de las cabeceras municipales del territorio nacional.
NO SE INCLUYEN EN LA MUESTRA:
POBLACIÓN OBJETIVO
Las personas de 5 años y más residentes en los hogares particulares de las cabeceras municipales del territorio nacional.
La escogencia de este rango de edad parte de la necesidad de entregar información no solo sobre jóvenes, adultos y personas de la tercera edad, haciéndose expresas las tendencias generales por diferencias generacionales, sino también sobre las preferencias y prácticas de los menores de edad entre los 5 y 11 años, en consonancia con el reconocimiento como sujetos de derechos y el interés de las políticas públicas por posicionar en la agenda estatal y de los diferentes sectores, la preocupación por su cuidado y promoción así como por el cumplimiento y responsabilidad compartida en su desarrollo.
Como la encuesta está concebida, no permite indagar de manera adecuada por la población entre los 0 y 4 años de edad, pues dicha vinculación exigía un cuestionario diferenciado acerca de bienes y servicios culturales acotados al periodo de la infancia. Además, su inclusión exige un tratamiento operativo y logístico diferente, así como una proyección de tiempos de rendimiento diferenciados que ampliaban el tiempo de trabajo, lo que implicaba un aumento en el presupuesto que se tenía proyectado.
Name |
---|
Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización - DIRPEN |
Name | Affiliation | Role |
---|---|---|
Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización - Encuesta de Consumo Cultura | Departamento Administrativo Nacional de Estadística - DANE | Equipo Técnico |
Name | Role |
---|---|
Departamento Administrativo Nacional de Estadística | Ejecutor |
DISEÑO
El diseño de muestra aplicado para esta encuesta es probabilístico, de tres etapas y estratificado en la primera etapa ESTMAS - MAS - MASC.
MARCO MUESTRAL
El marco muestral para la encuesta de Consumo Cultural corresponde al listado de la base cartográfica del DANE, que contiene información del departamento, municipio, sector, sección y manzana. En la primera etapa, a nivel de municipio, se cuenta con información auxiliar del total de personas en cada municipio según Censo de Población 2005 y para la segunda etapa, a nivel de manzana, con la cantidad de hogares en cada manzana.
Para establecer el marco de muestreo de hogares, se lleva a cabo una etapa en campo denominada enlistamiento. En este proceso se listan y ubican los hogares existentes dentro de los conglomerados que hacen parte de la muestra.
TIPO DE MUESTREO
El tipo de diseño de muestra que se emplea en cada etapa se elige con base en observaciones hechas de una variable de estudio de interés en investigaciones anteriores, o tomando como base los resultados obtenidos de una prueba piloto anterior, que permite observar indicadores como el coeficiente de correlación intraclásica o las varianzas obtenidas por estrato de selección.
El diseño de muestra que se utiliza en la encuesta de Consumo Cultural 2008 es probabilístico, en tres etapas estratificado en la primera etapa y de conglomerados en la última: ESTMAS - MAS - MASC, es decir:
Probabilístico: todas las unidades de muestreo en las diferentes fases y etapas, tienen probabilidad de selección conocida y superior a cero de ser seleccionadas.
ESTMAS: hace referencia a la primera etapa del diseño en donde se selecciona una muestra, a través de muestreo aleatorio simple (MAS), de municipios dentro de cada estrato.
MAS: hace relación a la segunda etapa del diseño, en la que se seleccionan conglomerados utilizando muestreo aleatorio simple, dentro de cada municipio escogido en la etapa anterior.
MASC: En la tercera etapa se seleccionan de forma aleatoria simple hogares y se indaga a TODAS las personas de cinco años y más en cada uno. Dentro de la teoría de muestreo esto se conoce como diseño por conglomerados.
En tres etapas: la selección de las unidades finales de muestreo se realiza en tres etapas donde primero se seleccionan municipios, luego conglomerados y finalmente hogares.
PRIMERA ETAPA DE MUESTREO - SELECCIÓN DE MUNICIPIOS
El diseño es ESTMAS estratificado y al interior de cada estrato se selecciona con Muestreo Aleatorio Simple MAS.
Para la selección de municipios se estratificó el marco de muestra de acuerdo con el tamaño del municipio formando seis estratos, los límites de estos estratos fueron establecidos mediante el algoritmo de Lavalle.-Hidriroglou (1), utilizando como criterio de estratificación la cantidad de personas en la cabecera municipal.
SEGUNDA ETAPA DE MUESTREO - SELECCIÓN DE CONGLOMERADOS
Al interior de cada uno de los 68 municipios seleccionados en la primera etapa se conforman las Unidades Secundarias de Muestreo que corresponden a conglomerados. Un conglomerado es un conjunto de manzanas que pertenecen a una misma sección cartográfica y que agrupan una cantidad determinada de hogares. Estos conglomerados se conforman tomando como base el total de hogares en cada manzana cartográfica, según Censo de Población 2005, y dependiendo del estrato del municipio la cantidad de hogares en el conglomerado es diferente, de tal forma que para las ciudades de Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla cada conglomerado tiene en promedio 200 hogares. Para los otros municipios la cantidad aproximada de hogares en cada conglomerado es:
Estrato 1: 120 Hogares
Estrato 2: 100 Hogares
Estrato 3: 90 Hogares
Estrato 4: 60 Hogares
Estrato 5: 60 Hogares
Estrato 6: 40 Hogares
Una vez conformados los conglomerados mediante Muestreo Aleatorio Simple -MAS-, se seleccionó una muestra al interior de cada municipio.
TERCERA ETAPA DE MUESTREO - SELECCIÓN DE HOGARES
Al interior de cada uno de los conglomerados se seleccionan hogares por Muestreo Aleatorio Simple MAS. La cantidad de hogares seleccionados en cada conglomerado depende del estrato del municipio.
Municipios estrato 1: 20 hogares por conglomerado
Municipios estrato 2: 15 hogares por conglomerado
Municipios estrato 3: 10 hogares por conglomerado
Municipios estrato 4: 10 hogares por conglomerado
Municipios estrato 5: 10 hogares por conglomerado
Municipios estrato 6: 17 hogares por conglomerado
La encuesta de Consumo cultural se aplica en 68 municipios de 26 departamentos del país. La cantidad final de hogares seleccionados para la Encuesta de Consumo Cultural fue de 12.031 hogares.
La encuesta de Consumo cultural se aplica en 68 municipios de 26 departamentos del país.La cantidad final de hogares seleccionados para la Encuesta de Cultura fue de 12.031 hogares
Uno de los principales criterios para determinar la calidad de la estimación de un parámetro es la variabilidad que tienen los posibles resultados de dicha estimación. Esta variabilidad se puede medir con la varianza del estimador, la cual depende de muchos factores como el diseño de la muestra, el tamaño de la muestra, el parámetro que se desea estimar, los niveles de desagregación, entre otros. Otra medida de variabilidad relacionada con la varianza es la desviación estándar de la distribución o error estándar que se calcula como la raíz cuadrada de la varianza.
Un criterio más uniforme para determinar la precisión de un estimador es el coeficiente de variación, el cual se define como el cociente entre el error estándar y el estimador multiplicado por 100.
Aunque la varianza, el error estándar y el coeficiente de variación, miden la magnitud de la variabilidad de la distribución de la muestra del estimador, es decir, lo que comúnmente se denomina el error de muestreo, el coeficiente de variación tiene la ventaja de dar esta medida en términos porcentuales, por lo cual es una medida común para estimaciones.
En este aspecto, entre menor sea el error muestral menos incertidumbre se tiene de un resultado e indica que dicho resultado es más preciso. La encuesta de Consumo Cultural espera obtener coeficientes de variación estimados -cve- inferiores al 8% para los principales indicadores a nivel nacional e inferiores al 12% para los principales indicadores a nivel regional.
ESTIMADORES Y FACTORES DE EXPANSIÓN
El factor de expansión es un valor que multiplica a cada uno de los elementos seleccionados en la muestra con el fin de obtener la estimación del parámetro en el universo. Este factor depende y se elabora a partir del método de selección utilizado.
Para el diseño de tres etapas estratificado en la primera etapa ESTMAS - MAS - MASC, el factor de expansión se construye como el producto de los factores de expansión en cada una de las etapas de selección.
Para el diseño en consideración de la encuesta de Consumo Cultural ESTMAS - MAS - MASC se tienen los factores de expansión por etapas de la siguiente manera:
Nota: el factor de expansión correspondiente a cada individuo dentro de un hogar seleccionado es igual a la unidad (f exp individuo = 1), puesto que se eligen todas las personas de cinco años y más, es decir, esta parte del diseño es la que se conoce como muestreo por conglomerados.
FACTOR DE EXPANSIÓN BÁSICO
El factor de expansión es un valor que multiplica a cada uno de los elementos seleccionados en la muestra con el fin de obtener la estimación del parámetro en el universo. Este factor depende y se elabora a partir del método de selección utilizado.
Para el diseño de tres etapas estratificado en la primera etapa ESTMAS – MAS – MASC, el factor de expansión se construye como el producto de los factores de expansión en cada una de las etapas de selección.
Nota: el factor de expansión correspondiente a cada individuo dentro de un hogar seleccionado es igual a la unidad (f exp individuo = 1 ), puesto que se eligen todas las personas de cinco años y más, es decir, esta parte del diseño es la que se conoce como muestreo por conglomerados.
El factor de expansión básico se define como el producto de los factores de expansión de las tres etapas de diseño. Este factor se aplica a cada uno de los individuos pertenecientes a los hogares seleccionados en la última etapa del diseño. La suma de los factores de expansión de todos los individuos de la muestra provee una estimación del tamaño del universo de estudio.
ESTIMADORES DE TOTALES Y RAZONES
Con los factores de expansión calculados se define el estimador del total de una variable de estudio en el universo, en función de los valores observados con la muestra.
Este no es un estimador lineal, luego el cálculo de la estimación de su varianza difiere de los métodos convencionales. Aplicando el método de linealización de Taylor y construyendo una nueva variable que recoge dicho término de varianza, se obtiene un estimador de la varianza del estimador.
Los promedios y las proporciones se trabajan como casos particulares del estimador de razón cuando los numeradores y los denominadores cambian en concepto, y éstos pueden pasar de ser variables continuas a categóricas. Una forma de generar estimaciones para diferentes proporciones o promedios (dependiendo del requerimiento de investigación) es mediante la formación de variables indicadoras de dominio que toman el valor de 1, si un individuo de la muestra pertenece a un dominio de interés y 0 en caso contrario.
Entiéndase al dominio de un universo como un conjunto de individuos contenido en éste, que presentan una característica discriminatoria Z que los ubica dentro de una categoría particular observada.
Las proporciones y los promedios solicitados en cuadros de salida, se construyen formando cocientes de diversos estimadores de dominios y de totales. Las fórmulas no varían.
Finalmente, para obtener la estimación general a la que se quiere llegar, se agregan los estratos Si el estimador resulta ser de razones, las fórmulas para el cálculo de la varianza no se alteran si se emplean en lugar de xl los valores de ul.
BASE CONCEPTUAL: SOBRE EL CONCEPTO DE CULTURA Y SU RELACIÓN CON LAS PERCEPCIONES Y LAS PRÁCTICAS
EL DEBATE DE LA DEFINICIÓN DE CULTURA
Lo cultural alude a los modos en que las sociedades producen percepciones y prácticas traducidas en formas de comportamiento, estilos de vida, creencias, sistemas de valores y de pensamiento. Estas formas de ser (prácticas) y de pensar (percepciones) se expresan y se materializan a través de manifestaciones tan variadas que pueden abarcar las creaciones estéticas (la música, la pintura, la danza, el cine, etc.), las expresiones monumentales del patrimonio de una nación, sus costumbres culinarias, así como también la innovación científica y tecnológica. Las formas de relación social, los modos de consumo, y las concepciones sobre el cuerpo y el medio ambiente, por poner otros ejemplos, también son culturales.
Lo cultural constituye las distintas dimensiones de la vida social, dimensiones que además se encuentran en permanente transformación y cambio. De allí la imposibilidad y probablemente inconveniencia, de generar definiciones normalizadas sobre el concepto de cultura. Cualquier intento de definición de cultura corre el riesgo de ser excluyente, al no abarcar y dar cuenta de la complejidad de los procesos culturales; de cosificar los procesos culturales, es decir de reducirlos a objetos, cosas separadas de lo social; o de ser tan general y abstracta que no se le encuentre mayor utilidad.
ALGUNOS INTENTOS DE DEFINICIÓN
En 1952 los antropólogos Alfred Kroeber y Clyde Kluckhohn publicaron un estudio en donde recopilaron las 160 definiciones de cultura que se habían generado hasta ese momento. Allí se incluyó la definición propuesta por Edward Taylor a finales del siglo XIX, la cual influyó enormemente en la disciplina antropológica norteamericana durante gran parte del siglo XX. Taylor definió la cultura como:
“...aquel todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres, y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por el hombre. La situación de la cultura en las diversas sociedades de la especie humana, en la medida en que puede ser investigada según principios generales, es un objeto apto para el estudio de las leyes del pensamiento y la acción del hombre”.
En 1982 la UNESCO, en el marco de la Conferencia Mundial sobre las Políticas Culturales (MONDIACULT, México, 1982), amplió la concepción de cultura limitada a “las artes y las letras” y asumió una noción antropológica más amplia evidentemente marcada por la definición propuesta por Taylor.
“Cultura comprende el conjunto de rasgos distintivos, espirituales, materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan a una sociedad o grupo social, y [...] abarca, además de las artes y las letras, los modos de vida, las formas de vivir juntos, los sistemas de valores, las tradiciones y creencias”.
Posteriormente esta definición fue ratificada en el marco de la Comisión Mundial de Cultura y Desarrollo (Nuestra Diversidad Creativa, 1995) y de la Conferencia Intergubernamental sobre Políticas Culturales para el Desarrollo (Estocolmo, 1998). Esta definición es la que aún rige en la UNESCO y es la que acoge la Ley General de Cultura (Ley 397 de 1997) que rige la actividad del sector cultural en Colombia.
Otra de las definiciones que más ha influido en los estudios sociales durante las últimas décadas, fue propuesta por Clifford Geertz a finales del siglo XX, quien asume lo cultural como un entramado simbólico de sentidos que permiten conferir significado a la vida social. Desde esta perspectiva, para Geertz, el estudio de lo cultural no reside en descifrar patrones o modelos de conducta, sino en interpretar cuál es el significado de las conductas o formas de ser dentro de cada contexto específico. Al respecto dice:
“Entendida como sistemas en interacción de signos interpretables (símbolos), la cultura no es una entidad, algo a lo que puedan atribuirse de manera causal acontecimientos sociales, modos de conducta, instituciones o procesos sociales; la cultura es un contexto dentro del cual pueden describirse todos esos fenómenos de manera inteligible”.
PROCESOS QUE EXPLICAN Y DAN SIGNIFICADO A LAS MANIFESTACIONES CULTURALES
Por su parte, las tendencias actuales resaltan el carácter dinámico, diferenciado y cambiante de lo cultural. Esta noción de cultura incluye tanto las manifestaciones culturales así como los procesos que han dado origen, explican y dan significado a esas manifestaciones. Esta postura, asumida por el Plan Nacional de Cultura 2001-2010 Hacia Una Ciudadanía Democrática Cultural, se pregunta por el modo en que se transforma lo cultural, según cada historia particular de cada contexto específico.
De allí que en este plan no se hable de “la cultura”, entendida como algo dado, monolítico y sustantivo, sino de “lo cultural” expresión que en el contexto del plan incluye “además de las manifestaciones [...] los procesos que explican su aparición y les confieren razón de ser. Procesos que con el paso del tiempo hacen que las manifestaciones se vayan resignificando y se sigan reproduciendo, o que simplemente pierdan sentido y desaparezcan. Situarse en lo cultural permite concebir la cultura desde una perspectiva dinámica y en permanente configuración, la cultura como algo vivo que se crea y se recrea permanentemente, dependiendo de las necesidades de su contexto”.
Esta noción ampliada de cultura es el resultado no solo de la reflexión académica sino que hace parte de las demandas que durante gran parte del siglo XX hicieron movimientos sociales que reivindicaron la diversidad cultural y el reconocimiento de distintos estilos de vida y formas de pensar. Grupos étnicos, de mujeres, de jóvenes, de homosexuales, de discapacitados y de migrantes, entre otros, denunciaron exclusiones y discriminaciones. Movimientos que aún hoy exigen que se reconozcan sus formas de vida, sus memorias, sus expresiones, y en general sus intereses específicos, han hecho que el discurso social sobre lo cultural se amplíe y se vincule más a procesos sociales.
LA CULTURA COMO CAMPO DE ACCIÓN DEL SECTOR CULTURAL
La noción amplia y compleja de cultura desborda cualquier intento de definición y, por lo tanto, también desborda los límites y la capacidad de respuesta de lo que institucionalmente se conoce como el sector cultural. Es prácticamente imposible que la institucionalidad de este sector de cuenta de todo lo cultural ya que la cultura está presente en todas las dimensiones de la vida social. Son culturales las prácticas de higiene y las formas de percibir la sexualidad, sin embargo éstas son preocupaciones de la política de salud pública. Es cultural el modo en que se establecen las relaciones con el medio ambiente y, sin embargo, ésta es una preocupación del sector ambiental. La preocupación por lo cultural trasciende la organización sectorial y se convierte en un elemento que atraviesa transversalmente a los distintos sectores institucionales. De allí que es probable que en todos los sectores existan preocupaciones sobre lo cultural asociadas a la necesidad de entender percepciones y prácticas que hacen referencia a contextos y situaciones específicas.
El sector cultural por su parte, consciente de esta característica inherente a su ámbito de intervención delimitó, en el marco del Plan Nacional de Cultura 2001-2010, los distintos campos de política y las distintas disciplinas, temas y problemas que deben ser incluidos como objeto de la política cultural en términos sectoriales. Muchos de estos intereses habían sido atendidos desde varias décadas atrás (las expresiones artísticas, incluyendo las de sectores populares, las expresiones del patrimonio material, los medios de comunicación, el cine, las bibliotecas, los archivos y los museos). Otros temas en cambio, como las formas de creación asociadas al Internet, las relaciones entre los distintos grupos culturales, la relación entre cultura y convivencia, y las demandas culturales de los movimientos sociales, surgieron como propuestas novedosas que aún hoy no logran ser completamente asumidas por este sector pero que se encuentran en su agenda de trabajo en el mediano y largo plazo.
LIMITES DE ACCIÓN DEL SECTOR CULTURAL
Los campos de política definidos en el marco del Plan Nacional de Cultura 2001-2010, permiten acercarse al modo en que el sector cultural ha entendido en los últimos años el concepto de cultura y ha delimitado su acción dentro de lo cultural. Son tres campos en los cuales se inscriben las acciones de este sector.
El primero de ellos, el campo de participación, incluye todas las acciones conducentes a la participación e incidencia de los ciudadanos en los procesos de toma de decisión asociados a la gestión cultural y a la formulación de política pública. Para este sector la participación ciudadana plural es fundamental ya que constituye un mecanismo para que la actividad cultural refleje la diversidad de un país que constitucionalmente ha sido reconocido como pluriétnico y multicultural. Dentro de este campo se incluyen acciones asociadas a la participación en los consejos e instancias del Sistema Nacional de Cultura, la formulación de planes de cultura en los niveles municipal y departamental, la inclusión expresa de lo cultural en los planes de desarrollo y en los planes sectoriales, y el reconocimiento de las propuestas y demandas de los movimientos sociales en relación a lo cultural.
El segundo es el campo de creación y memoria y las políticas formuladas en él buscan impulsar procesos de expresión y creación, así como preservar las manifestaciones de la memoria de los distintos grupos que conforman la nación colombiana. Da respuesta a los intereses y necesidades de las siguientes áreas:
El tercero es el campo de diálogo cultural, en el cual se ubican las políticas que buscan fortalecer el reconocimiento de la diversidad y la comprensión de las diferencias culturales entre distintos grupos y personas. Se incluyen aquí políticas de atención diferenciada, dirigidas a grupos poblacionales específicos (infancia y juventud, población en situación de discapacidad, grupos étnicos, homosexuales etc.). Grupos que reivindican el reconocimiento de su condición particular y sus estilos de vida.
Las políticas de este campo exploran la relación entre cultura y convivencia, y buscan mejorar las relaciones entre distintas propuestas culturales (relaciones de género, entre generaciones e incluso relaciones entre grupos distintos de una misma cultura). En este campo de política se hace evidente la noción ampliada de cultura que ha adoptado el sector cultural en los últimos 10 años. Noción que incluye, además de las expresiones artísticas y las manifestaciones del patrimonio material, formas de vida, creencias y prácticas.
A pesar de que el tema de la diversidad asociado a la garantía de derechos hace parte de la agenda política desde hace más de una década, en Colombia éste es aún un campo de acción novedoso para el sector cultural que no ha logrado ser abordado en toda su complejidad ni aprovechado en toda su potencialidad.
LA CULTURA COMO PREOCUPACIÓN DE OTROS SECTORES
Dado que la cultura constituye distintas dimensiones de la vida social, en términos institucionales diferentes sectores han expresado su interés por fenómenos culturales. Fenómenos asociados a prácticas y percepciones implicadas en la convivencia ciudadana y en el bienestar individual y colectivo. Es así como para el sector salud resulta fundamental comprender fenómenos asociados a las prácticas alimentarias, sexuales, higiénicas y de consumo de sustancias psicoactivas; así como comprender las diferentes formas de percibir la salud y la enfermedad. Para los sectores energético, ambiental y agrícola, por su parte, resulta fundamental entender e intervenir sobre las prácticas que pueden generar impactos positivos o negativos en el medio ambiente. Para los sectores financiero, industrial y comercial resulta importante comprender los fenómenos asociados a las prácticas de consumo en contextos culturales particulares. Para el sector educativo y para las instituciones interesadas en temas de seguridad y de formación de ciudadanía, resulta clave comprender las formas en que se relacionan los ciudadanos entre si, así como las prácticas y percepciones que tienen acerca de lo público y lo político.
La condición transversal de la cultura exige replantear la formulación de políticas culturales de tal forma que den cuenta de esta realidad compleja para los Estados, tal y como sugiere Lucina Jiménez:
“Necesitamos redimensionar y trascender el papel del Estado latinoamericano, en relación con las políticas culturales para no quedarse simplemente como distribuidor de recursos cada vez menores, ni de bienes y servicios cuyo papel tiene que redefinirse ante los nuevos contextos globales, los comportamientos de los públicos y los impactos del desarrollo tecnológico. Es menester trabajar en el diseño de políticas culturales capaces de ver la cultura no sólo como recurso ético y estético, sino de colocarla en las agendas nacionales e internacionales para el desarrollo. Necesitamos políticas orientadas hacia la constitución de un sector con posibilidades de acción transversal e intersectorial y eso pasa por un conjunto de transformaciones de mediano plazo que reclaman acciones urgentes”.
El presente ejercicio estadístico constituye un aporte a la construcción de esa mirada compleja, transversal e intersectorial de lo cultural, que espera sustentar la formulación de políticas desde distintos sectores.
CULTURA Y MEDIO AMBIENTE
El análisis de la problemática ambiental hoy día se aborda apoyado en el enfoque ecosistémico, que resulta integral en la medida que, además de contemplar los elementos básicos de la vida en la tierra, es decir, la atmósfera, el agua, el suelo y las formas vivas que estos elementos albergan, incluye las interacciones de estos elementos entre si y con los seres humanos.
El concepto de desarrollo sostenible contemplado en la Ley 99 de 1993 como principio general de la política ambiental colombiana, tiene implícito la necesidad de hacer compatible las necesidades humanas con la capacidad biológica de los ecosistemas para satisfacerlas, y de allí el requerimiento de considerar como parte de la información ambiental, no solo el componente físico-biótico, sino además su relación con la estructura sociocultural y las dinámicas que tal relación conlleva. Es decir, las percepciones así como las prácticas que subyacen al modo en que los seres humanos se relacionan con su entorno. Este requerimiento resulta evidente de la definición de monitoreo ambiental suscrita por el Instituto SINCHI (López, 2007), partiendo de las consideraciones plasmadas en la Política Nacional de Investigación Ambiental (MMA, DNP y COLCIENCIAS, 2001).
En el marco conceptual del Sistema de Información Ambiental de Colombia -SIAC- se plantea la representación del mundo como un conjunto de cinco esferas: 1. La atmósfera, que constituye la capa gaseosa que cubre el planeta, 2. La hidrosfera, que comprende el agua en sus diferentes estados (sólido, líquido y gaseoso) y se encuentra en las aguas continentales, los océanos, los casquetes polares y glaciares, 3. La Litósfera, que incluye el suelo, la corteza terrestre y parte del manto superior, 4. La Biósfera, que constituye todos los organismos vivos (excepto el ser humano), y 5. La Antropósfera, que incluye todas las actividades, relaciones y funciones de la sociedad humana.
En todas y cada una de las esferas mencionadas se deposita masa en diferentes estados y energía en diferentes formas. La interacción de las esferas hace que las proporciones de masa y energía varíen, como resultado de intercambio entre las esferas. Este modelo conceptual considera el ambiente como la interacción entre la sociedad y la naturaleza (MAVDT et. al., 2007). De allí que resulte que este ejercicio estadístico pregunte por la relación existente entre cultura y medio ambiente.
El Sistema Ambiental, de una manera general y sistémica, puede considerarse como conformado por tres subsistemas: el subsistema social, el subsistema económico y el subsistema natural. Se destaca en este concepto la inclusión de la antropósfera, entendida como “Conjunto de hábitat y sistemas auxiliares creados por el hombre”. (Mata & Quevedo, 1998; citado en MAVDT et. al., 2007).
Ahora bien, dado el propósito de identificar un conjunto completo de temáticas ambientales que sean de interés del DANE en el marco del diseño de los módulos de Cultura y Medio Ambiente de la Encuesta de Cultura 2009, se considera adecuado partir de esta base teórica para realizar una propuesta jerarquizada de temáticas, apoyándose además en un criterio de relevancia territorial (global, nacional, regional, local) y entorno (urbano, rural, natural), dado que los intereses y preocupaciones ambientales de la población se forman dependiendo de estos criterios.
LOS CONCEPTOS DE CULTURA Y MEDIO AMBIENTE EN EL MARCO DE ESTÁ ENCUESTA
CULTURA
Esta encuesta se nutre de las perspectivas conceptuales presentadas anteriormente, y asume el concepto amplio de cultura que incluye, además de las manifestaciones artísticas y las distintas expresiones de la memoria, percepciones y prácticas. Formas de comportamiento y maneras de pensar que se alimentan mutuamente y que se construyen en un entramado simbólico que le confiere significado y razón de ser a su existencia. También asume la noción ligada al desarrollo de procesos que se nutren de fenómenos locales, regionales, nacionales y globales. Procesos sociales, económicos y culturales que explican lo cultural y hacen de éste un campo dinámico y en permanente configuración. Esta perspectiva facilita estar alerta al surgimiento de nuevas expresiones culturales, nuevas prácticas, nuevos sentidos y nuevos significados que deben ser identificados, reconocidos y comprendidos; especialmente si se encuentran implicados en la convivencia, en procesos de configuración de lo público, en la realización de los derechos ciudadanos y en la protección de intereses colectivos de las generaciones del presente y del futuro.
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MEDIO AMBIENTE
Por su parte, se asume la perspectiva ecosistémica de medio ambiente la cual concibe las distintas esferas del entorno natural (atmósfera, hidrósfera, biósfera, litósfera, antropósfera) y su relación con la satisfacción de las necesidades de los seres humanos en el presente y en el futuro. Esta perspectiva conceptual vincula medio ambiente (entorno natural) y desarrollo (necesidades humanas) y fue planteada entorno al concepto de desarrollo sostenible de la Declaración de Río de 1992.
Perspectiva que, a su vez, sustenta los planteamientos de la Ley 99 de 1993 que rige lo relacionado con la protección del medio ambiente en Colombia.
NECESIDADES DE INFORMACIÓN ASOCIADAS A LA CULTURA: UNA AGENDA A MEDIANO Y LARGO PLAZO.
NECESIDADES DE INFORMACIÓN DEL SECTOR CULTURA
Teniendo en cuenta las recomendaciones del documento de política: Visión Colombia II Centenario "Forjar una Cultura para la Convivencia", se ha elaborado una agenda que plantea las necesidades de información del sector cultura a mediano y largo plazo. En general se trata de información que aborde la relación entre la oferta y demanda de bienes y servicios provistos por el sector cultural. Se busca generar información que permita el análisis de los siguientes aspectos: cobertura de la oferta; percepción acerca de la pertinencia, calidad y pluralismo de la oferta en relación a las necesidades e intereses de la diversidad cultural; participación ciudadana e incidencia en los procesos de toma de decisión sectorial; participación ciudadana plural en procesos de creación, expresión y preservación de distintas expresiones de la memoria.
Esta información se recopilará a través de la aplicación alternada de distintos módulos de la Encuesta de Cultura. Se propone que esta encuesta mantenga de manera permanente un módulo dedicado a satisfacer las necesidades de información del sector cultural. Este módulo se combinará, cada dos años, con otro módulo donde se aborden aspectos culturales que interesan a otros sectores. Adicionalmente, además del aporte de la Encuesta de Cultura a la construcción de esta información, se plantea acudir a los Planes de Fortalecimiento de Registros Administrativos, censos y caracterizaciones sectoriales, con el fin de construir un corpus integral de información que complemente la información recopilada por el Sistema Nacional de Información Cultural -SINIC-.
NECESIDADES DE INFORMACIÓN CULTURAL DEL SECTOR AMBIENTAL
Respecto a las necesidades de información sobre percepciones y prácticas culturales asociadas al Medio Ambiente, se plantea también una agenda a mediano y largo plazo. Siguiendo el marco conceptual del Sistema de Información Ambiental de Colombia -SIAC-.
DISEÑO DE INSTRUMENTOS
En este caso se utilizó un cuestionario que combina características, hechos y acontecimientos con motivos y razones sobre ciertas prácticas culturales que realizan las personas de los hogares de las cabeceras municipales. Por el momento, y aunque es uno de los ejes centrales de lo cultural, las preguntas sobre opiniones, actitudes y sentidos, hacen parte de las futuras exploraciones.
El cuestionario tiene ocho módulos, los tres primeros permiten la identificación y localización de la vivienda, el conocimiento de la composición del hogar y las características generales de las personas. Los cinco módulos restantes integran las categorías conceptuales sobre consumo cultural, así:
Módulo A. Identificación y Módulo B. Datos de registro: permiten determinar la ubicación, la localización y las características generales de los hogares a encuestar para determinar su nivel socioeconómico y su estructura familiar. Total de preguntas: siete (7)
Módulo C. Características generales de las personas: con este grupo de preguntas se conocen las características básicas de los encuestados para obtener perfiles sociodemográficos sobre los residentes en Colombia. En este punto se obtiene información relacionada con el sexo, la edad, el estado civil, el origen étnico, el grado de escolaridad, la actividad principal y el nivel de ingresos mensuales. Total de preguntas: nueve (9)
Módulo D. Tiempo libre: identifica la cantidad de tiempo y las actividades que realizan las personas en su tiempo libre en una semana. Total de preguntas: tres (3)
Módulo E. Asistencia a presentaciones y espectáculos culturales: posibilita la caracterización de asistencia, gasto y razones de no asistencia a presentaciones y espectáculos culturales. Total de preguntas: trece (13)
Módulo F. Publicaciones y audiovisuales: indaga por la asistencia (servicios) y uso (bienes), frecuencias, tipos de acceso y razones de no uso/asistencia de bienes y servicios culturales. Total de preguntas: cuarenta y dos (42)
Módulo G. Asistencia a espacios culturales: establece el grado de asistencia, frecuencia y motivos de no asistencia a espacios culturales. Total de preguntas: trece (13)
Módulo H. Formación y práctica cultural: permite conocer las preferencias de las personas relacionadas con el acceso a ofertas educativas culturales y artísticas informales, así como con la realización de una práctica cultural en sectores culturales específicos. Total de preguntas: cuatro (4).
Start | End | Cycle |
---|---|---|
2009-09-16 | 2009-11-20 | Anual |
Start date | End date | Cycle |
---|---|---|
2009 | 2009 | Anual |
Name | Affiliation |
---|---|
Departamento Administrativo Nacional de Estadística | Gobierno Nacional |
Respecto con el proceso de supervisión del trabajo de campo, lo asume el grupo de supervisores bajo la dirección del coordinador de campo, y para tal fin los supervisores diligencian los formatos que permiten controlar los avances del operativo y las respectivas coberturas.
Para el proceso de control, el equipo logístico de la encuesta con el apoyo del grupo de sistemas, diseñó un conjunto de formatos en papel que facilitan el monitoreo y supervisión tanto de la etapa de enlistamiento, como de la fase de recolección de la información, hecho que permite comparar los datos obtenidos en campo con el reporte que entregan los dispositivos móviles de captura. Entre ellos están:
Así mismo, se realiza un exhaustivo inventario y control a cada uno de los encuestadores para establecer el número y tipo de elementos que lleva consigo en todo el proceso. Al final de las sesiones de cada día, los supervisores deben hacer las siguientes actividades:
Las especificaciones de validación y consistencia así como los códigos que se emplean en el proceso de recolección de información, son incorporados en el software de captura que tiene la DMC, por lo cual este proceso se realiza automáticamente a medida que la información es recolectada. Diariamente se generan reportes de cobertura departamentales, los cuales son enviados al coordinador territorial para que pueda verificar el estado de cobertura del operativo, además de observar los avances diarios en la cobertura estimada tanto de supervisores como de encuestadores.
CONSOLIDACIÓN DE ARCHIVOS
Al recibir la información por parte de cada técnico, se debe organizar en un árbol jerárquico establecido con antelación de la siguiente forma: departamento, municipio, carpeta de envío (supervisor, encuestador, fecha y hora de sincronización y carpeta que contiene puntos completos). A los archivos recibidos se les realiza un proceso de transformación que permite la lectura y cargue de la información contenida en los mismos a la base de datos.
La información en base de datos es organizada en tablas, las cuales tienen una relación jerárquica desde el aspecto más amplio hasta el más concreto y manejan los siguientes criterios como: llave primaria, llave foránea e índices, los cuales permiten una mejor interrelación entre las diferentes tablas que componen la base de datos.
El principal criterio de clasificación, al momento de la generación de reportes que muestran la información almacenada en los registros existentes en la base de dato, es la división político-administrativa del país. Estos reportes son generados tanto en el marco nacional como departamental y municipal.
NORMAS DE VALIDACIÓN Y CONSISTENCIA
Dada la importancia del proceso de consistencia para asegurar la calidad de la información, se crean las reglas de validación y consistencia que son especificaciones coherentes con el flujo del formulario, así como con las lógicas temáticas que permiten conocer y descartar casos atípicos.
En conjunto con el equipo temático, estadístico, operativo y de sistemas se verifica que el desarrollo final del formulario de captura en DMC cumpla con las normas de validación y consistencia establecidas para esta encuesta. Este proceso se lleva a cabo gracias a las pruebas realizadas por los diferentes agentes involucrados en la construcción del formulario. Se aclara que estas pruebas se ejecutan antes del inicio de operativo en campo con el fin de hallar posibles errores en el desarrollo, además para homogeneizar conceptos con respecto al formulario.
VERIFICACIÓN DE LA CONSISTENCIA INTERNA DE LOS DATOS Y AJUSTES
En este proceso se verifican los patrones de no respuesta para analizar su nivel de aceptabilidad y se pide verificación o en algunos casos, una nueva medición. Las bases se actualizan de forma tal que el nombre de las variables y los formatos de codificación no cambien. Además se evalúa que no ingresen observaciones repetidas.
Por otro lado, las observaciones atípicas se ven respecto a los valores medios usualmente analizados y desviaciones coherentes al fenómeno de estudio. Cuando un dato atípico es reportado, no se borra ni se imputa, si no que se pide una especificación de la medición y si es posible, se vuelve a tomar dicha medición para observar si es un fenómeno real que se está presentando.
En el caso del equipo de sistemas, el principal tipo de inconsistencia interna que puede ocurrir son los registros duplicados en la base de datos. Con esto se genera un reporte que se envía a cada territorial para hacer una posterior verificación de la información por parte del equipo de campo, el cual una vez consolidados y evaluados los registros, tanto los que ellos manejan como los que se les envían, tendrán como tarea informar cualquier irregularidad encontrada a DANE Central.
IMPUTACIÓN Y AJUSTES DE COBERTURA
En esta encuesta no se llevó a cabo ningún proceso de imputación de las unidades de observación, ya que se trata de una encuesta sobre prácticas culturales características de cada individuo y por lo tanto las preguntas son de carácter personal.
Por lo general, cuando la información de un individuo no se puede obtener, dicha no respuesta total del individuo continúa teniendo el factor de expansión que la metodología de muestra le ha asignado y por tanto, la tasa de individuos representados es asumida como no respondientes estimados del universo, lo cual puede ser un hecho falso.
Se asume que la pérdida de los individuos por no respuesta o por no cobertura, es un fenómeno aleatorio y se genera un factor de corrección mediante la suposición de una fase de diseño aleatoria simple en la recolección. Este factor se aplica directamente sobre el factor de expansión total deformándolo en el sentido de hacerlo mas pequeño a medida que la pérdida se incrementa, esto disminuye la varianza final de estimación. Las consecuencias están directamente relacionadas con la cobertura final de la encuesta.
Cálculo de precisión de los resultados
Uno de los principales criterios para determinar la calidad de la estimación de un parámetro es la variabilidad que tienen los posibles resultados de dicha estimación. Esta variabilidad se puede medir con la varianza del estimador, la cual depende de muchos factores como el diseño de la muestra, el tamaño de la muestra, el parámetro que se desea estimar, los niveles de desagregación, entre otros. Otra medida de variabilidad relacionada con la varianza es la Desviación estándar de la distribución o error estándar que se calcula como la raíz cuadrada de la varianza.
Un criterio más uniforme para determinar la precisión de un estimador es el coeficiente de variación, el cual se define como el cociente entre el error estándar y el estimador multiplicado por 100. Aunque la varianza, el error estándar y el coeficiente de variación, miden la magnitud de la variabilidad de la distribución de la muestra del estimador, es decir, lo que comúnmente se denomina el error de muestreo, el coeficiente de variación tiene la ventaja de dar esta medida en términos porcentuales, por lo cual es una medida común para estimaciones.
En este aspecto, entre menor sea el error muestral menos incertidumbre se tiene de un resultado e indica que dicho resultado es más preciso. La encuesta de Consumo Cultural espera obtener coeficientes de variación estimados -cve- inferiores al 8% para los principales indicadores a nivel nacional e inferiores al 12% para los principales indicadores a nivel regional.
ANÁLISIS ESTADÍSTICO
En la ejecución de la encuesta y su procesamiento, se pueden generar sesgos de información que pueden producirse por el mal diligenciamiento de formularios, una ubicación geográfica inadecuada, errores en la consolidación de la información y su procesamiento, los cuales se conocen como errores no muestrales. Para corregir y controlar dichas falencias y mantener los niveles de calidad, se hace una revisión constante por parte de cada uno de los componentes estadístico, temático, operativo y de sistemas. Dichos procesos resultan cuantificados y evaluados mediante indicadores de completes, cobertura y coeficiente de variación, que en consecuencia miden la calidad del resultado final.
En particular el error de muestreo se constituye en una herramienta para establecer parámetros de precisión en los resultados. Para su uso e interpretación se debe tener en cuenta que si la dispersión es alta, los parámetros estimados pierden utilidad, pues el valor verdadero del parámetro, en el universo, puede estar en un intervalo muy amplio lo cual no proporciona información útil. Por tanto esta medida de variabilidad es un criterio muy importante para determinar la calidad de una estimación.
Para los indicadores de completez se busca que sean superiores al 90%. En cuanto a los coeficientes de variación se suele considerar que el resultado de una estimación es bueno si su coeficiente de variación es menor del 5%; aceptablemente práctico, entre el 5 % y el 10%; de baja precisión si es mayor del 10 % y menor del 15%, y no útil si es mayor del 15%.
ANÁLISIS DE CONTEXTO
Este análisis consta en primera instancia del cálculo de las frecuencias simples de todas las variables nominales medidas en las encuesta. A partir de los resultados de las frecuencias sobre cada variable, se determinan características socio-demográficas y se describe la población objeto de estudio.
Se realizan comparaciones de proporciones entre el Censo de Población (2005) y la muestra de la Encuesta de Consumo Cultural y se establece el desfase con datos externos, que puede ser explicado por el nivel de cobertura. Para las variables más importantes de la encuesta, se emplean las frecuencias para observar niveles de desagregación aceptables.
Posteriormente, por ser el resultado de una metodología de muestreo probabilístico aplicado en la población de estudio, los cuadros de salida proveen conclusiones de la totalidad de los individuos que son la población objeto de estudio. Sin embargo, debe tenerse cuidado con las desagregaciones, ya que en este caso, muy pocos individuos podrían proporcionar la información que se infiere a una población específica.
En este aspecto, la validación con datos externos es prioritaria. El análisis de coherencia se desarrolla en el sentido de que las densidades demográficas principales del Censo de Población (2005) coincidan en proporción y en densidad con los resultados de las variables demográficas consultadas por la encuesta.
INDICADORES PARA EL CONTROL DE LA CALIDAD DE LOS PROCESOS DE INVESTIGACIÓN
Para establecer la calidad de los datos que provee la encuesta de Consumo Cultural, se obtienen cuatro indicadores a saber: el coeficiente de variación estimado, la tasa de cobertura, la tasa de encuestas completas y la tasa de oportunidad. En los cuadros de salida se establecen los coeficientes de variación para cada resultado Respecto con los otros tres indicadores, éstos se calculan a partir de los datos recolectados en el operativo de campo como del cronograma de la operación estadística.
INDICADOR DE COBERTURA
Este indicador permite medir la cantidad de hogares encuestados con respecto al total de hogares seleccionados según el diseño muestral. Para que este indicador sea aceptable, es esencial que haya logrado el mínimo nivel de referencia que, para el caso, es del 90% frente al total de hogares seleccionados en la muestra.
Si por diversos motivos no se obtiene el nivel de referencia esperado, es importante definir las causas y razones que no permitieron obtener dicho nivel, para así tomar las decisiones a las que haya lugar. El cálculo del indicador de cobertura se obtiene mediante la división entre el total de hogares encuestados y el total de hogares seleccionados por cien.
INDICADOR DE COMPLETEZ
Con este indicador se establece el nivel de completitud de la información recolectada y, al igual que la tasa de cobertura, el porcentaje mínimo aceptado es del 90%, lo que implica que una buena completitud de la información se obtiene cuando se establece que el 90% o más de las encuestas realizadas están completas. En este caso, se eligen una serie de variables importantes para determinar el nivel de completitud de cada encuesta.
Si la proporción de encuestas completas sobre el total de encuestas realizadas es menor al tope de referencia, se deben aclarar las posibles causas de esta situación para realizar las acciones pertinentes La fórmula con la cual se calcula el indicador de encuestas completas es:
IEC = (Encuestas completas / Encuestas realizadas)*100
INDICADOR DE OPORTUNIDAD
Este indicador se refiere a la oportunidad sobre la entrega de resultados de la encuesta de Consumo Cultural, y el resultado de la medida de este indicador se da en días. Para realizar el cálculo, se establece: la fecha real de entrega de resultados menos(-) la fecha planeada por cronograma para entrega de resultados.
Name | Affiliation | URL | |
---|---|---|---|
Departamento Administrativo Nacional de Estadística | Gobierno Nacional | www.dane.gov.co | dane@dane.gov.co |
Is signing of a confidentiality declaration required? | Confidentiality declaration text |
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yes | Ley 79 de 1993 Artículo 5: Los datos suministrados al Departamento Administrativo Nacional de Estadística DANE, en desarrollo de los censos y encuestas, no podrán darse a conocer al público ni a las entidades u organismos oficiales, ni a las autoridades públicas, sino únicamente en resúmenes numéricos, que no hagan posible deducir de ellos información alguna de carácter individual que pudiera utilizarse para fines comerciales, de tributación fiscal, de investigación judicial o cualquier otro diferente del propiamente estadístico. |
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El acceso a los microdatos anonimizados por licencia,cuando requiera procesamientos adicionales, podrá tener un costo que será definido mediante acto administrativo.
Se autoriza el uso de la información contenida en esta portal, siempre y cuando se haga la siguiente cita textual: "Fuente: Departamento Administrativo Nacional de Estadística: www.dane.gov.co ". Queda en cambio prohibida la copia o reproducción de los datos en cualquier medio electrónico (redes, bases de datos, cd rom, diskettes) que permita la disponibilidad de esta información a multiples usuarios sin el previo visto bueno del DANE por medio escrito.
Calidad de la información. Los datos e información en general que aparece en el portal se han introducido siguiendo estrictos procedimientos de control de calidad. No obstante, el DANE no se responsabiliza por el uso e interpretación realizado por terceros.
Ley 1032 de 2006
Name | Affiliation | |
---|---|---|
Amanda Lucía Soto Agudelo | DIRPEN - DANE | alsotoa@dane.gov.co |
DDI_COL_2009_ECC_v01_M
Name | Affiliation | Role |
---|---|---|
Ricardo Valenzuela Gutierrez | Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización - DIRPEN | Líder Base de metainformación |
Alba Leidy Londoño Lopez | Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización - DIRPEN | Documentador PAD |
Damaso Ivan Chavarria Gil | Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización - DIRPEN | Documentador PAD |
Astrid Caro Ramírez | Dirección de Regulación, Planeación, Estandarización y Normalización - DIRPEN | Verificador PAD |
2010-06
Version 02 (October 2014). Edited version based on Version 01 DDI (DANE-DIRPEN-ECC-2009) that was done by Columbia National Administrative Department of Statistics DANE.