La investigación dogmática con enfoque de derechos humanos (DH) de la reforma constitucional de 2008, refleja una crisis de inseguridad humana en su dimensión –ciudadana– hasta obligar al Estado a restringir los (DH) del policía reconocido judicialmente inocente, anteponiéndose el interés social de la seguridad, orden público, moral pública, los derechos y libertades de las demás personas; circunstancia que se aparta de la razón y la justicia, lo cual tratándose de garantías judiciales ni en caso de guerra tiene sustento. Esta aspiración política, se trató de racionalizar en el abatimiento de la corrupción e impunidad de las corporaciones policiacas. Lo que generó un cuadro de discriminación y violación del contenido esencial –jus cogens– de los DH, al apartarse de la razón y la justicia. Así, se propone un ejercicio de control de convencionalidad estricto, para lograr mediante el desempaque de DH la racionalización de la política pública de seguridad, a través de la recontratación del policía absuelto que reúna requisitos; generándose una doble técnica constitucional de depuración del mal elemento policiaco. Y por tanto, desde la perspectiva del enfoque de DH la sanción de no reinstalación del policía podría subsistir como medida de protección del orden público y la seguridad ciudadana.