Abstract |
Tras siglos de exclusión y dominación, a principios del nuevo milenio los pueblos indígenas, afrolatinos y afrocaribeños presentan los peores indicadores económicos y sociales y son, en gran medida, los más pobres de América Latina y el Caribe. Entre los factores originarios de la situación de pobreza de los pueblos indígenas, destaca la consiguiente pérdida de territorios ancestrales y el deterioro de los recursos naturales básicos para los modos de vida vernáculos. A este proceso de pérdida progresiva de tierras y del quiebre de las economías comunitarias, se sumaron los procesos de migración campo-ciudad, y la estructura y dinámica de la inserción laboral, tanto dentro de los espacios rurales como particularmente al interior de las ciudades. Tanto los grupos indígenas como afrolatinos y afrocaribeños presentan niveles de acceso a la salud, la educación, el empleo, los ingresos, la justicia y la deliberación política bastante inferiores a los niveles medios, y muy por debajo de los niveles que ostenta la población blanca. |