En este trabajo se analiza la situación de la mujer y la educación en México, en la década de los ochenta. Si bien el analfabetismo ha disminuido en términos generales, no es precisamente la población femenina la que se ha visto favorecida; las mujeres son “marginadas al interior de la marginación”. En el nivel de la educación básica, las cifras indican que las mujeres abandonan los estudios al término de cada ciclo escolar. En cuanto a la educación media, la participación femenina supera a la masculina en un 10%, aunque hay diferencias entre modalidades. En la educación superior, disminuye la desigualdad, en términos cuantitativos, de acceso por género, aunque persiste el rezago femenino. Durante la década estudiada, se registró un aumento en la participación femenina en el nivel de posgrado. Los trabajos de investigación sobre la mujer y la educación son escasos, y se han concentrado más en la educación superior.