Abstract |
Las PYMES son muy importantes en la economía ecuatoriana: representan el 95% de las unidades productivas, aportan con más del 25% del PIB no petrolero, generan el 60% del empleo, contribuyen con el 50% de la producción y cuentan con una amplia capacidad de adaptación y flexibilidad ante los cambios del entorno empresarial. Sin embargo, las PYMES ecuatorianas adolecen problemas y dificultades que tienen mucho que ver con su tamaño. A menudo no pueden captar oportunidades de mercado de manera individual, no pueden acceder a créditos financieros, no cuentan con tecnología y maquinaria adecuada, no tienen suficiente capacitación del talento humano y tienen débiles encadenamientos productivos. Ante estos antecedentes, los mecanismos de acción y asociación colectiva nacen bajo la necesidad de ver que el desempeño empresarial se puede analizar e impulsar de mejor manera cuando se tiene un claro entendimiento de todos los actores que participan en la producción de un bien o servicios. Pero en especial el modelo de cluster aparece como la herramienta más eficaz para solucionar algunos de los problemas que aquejan las PYMES ecuatorianas. Esta visión facilita el incremento en la productividad, competitividad, innovación, especialización, cooperación y flexibilidad en cada una de las PYMES que conformen el conglomerado. |